INVESTIGACIÓN | HELICONIA: ENTRE “DON BERNA” Y LOS ALCALDES VERRACOS

Heliconia es un municipio del occidente de Antioquia, por la vía que conduce al corregimiento de San Antonio de Prado, al sur del valle de Aburrá. Es famoso por la producción porcícola; además de tener en el parque principal un monumento el “verraco de Guaca” (1), el mito de un cerdo de gran tamaño que con su fuerza y gran tamaño conquistaba a las marranas hasta dejarlas cansadas y preñadas, andaba por las salinas dañando los sembrados, matando las gallinas y persiguiendo al que se le atravesara. Como él, en Heliconia, también hay políticos muy “verracos” que han hecho de la administración pública un espectáculo.

En Heliconia los alcaldes tienen una larga tradición disciplinaria y penal, para no hablar de otros que han sido asesinados, como el exalcalde Héctor Bedoya Vargas, quien en 1997 fue ultimado por impactos en bala en el corregimiento de Pueblito, a donde se había dirigido con varios miembros de su gabinete a dicha población para encabezar una actividad conocida con el nombre de toma comunitaria (El Tiempo, 9/04/1997).

El abril de 2005 el alcalde para el periodo 2004-2007, Jaime Alonso González, fue condenado tres (3) años de prisión por el delito de prevaricato por acción, por haber destituido de manera arbitraria al gerente de la ESE Hospital San Rafael, José Argemiro Velásquez Ramírez (Caracol Radio, 12/04/2005). Y en 2013 el exalcalde Jairo Humberto Cano Patiño fue suspendido por 30 días por “omitir el cumplimiento de sus deberes… en un contrato de compraventa para la adquisición de un inmueble… sin revisar la escritura pública antes de firmar”.

Por la época de la captura del exalcalde González se estaba en plena negociación con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en San José de Ralito, Córdoba, en donde se encontraba recluido Diego Fernando Murillo Bejarano, alias “Don Berna”, quien fue decisivo para la elección del alcalde Asdrúbal Gutiérrez Valdés, del movimiento Colombia Viva, por 1537 votos, sacándole una diferencia de 242 al segundo. Por éste partido fue congresista Rocío Arias, oriunda del Bajo Cauca.

¿El alcalde de Heliconia, Antioquia, apoyado por “Don Berna”, un jefe paramilitar que estaba en proceso de desmovilización y sometimiento a la justicia, a través de la Ley 975 de 2005? Sí. La revista Cambio (2) publicó una investigación sobre Los archivos de Don Berna (3) en la cual aparece relacionado el nombre del exalcalde Asdrúbal Gutiérrez Valdés y un hombre que se identifica como “Fredy”.

“Fredy” le escribe a “Don Berna” este mensaje de reconocimiento: “[…] Don Adolfo, espero se encuentre bien. Nosotros estamos muy contentos porque ya tenemos nuevo alcalde. Le agradezco su colaboración y la de la familia” (4). ¿Cuál es la “familia” que se menciona en el correo? Se refiere a los paramilitares.

Como lo señala Cambio: “políticos regionales… coincidieron en señalar que en esos municipios no sólo hay presencia constante de los paramilitares, sino que las autodefensas manipulan la política local, que los alcaldes hacen parte de Colombia Viva, el grupo político de Rocío Arias, representante a la Cámara por Antioquia, y que el apoyo de Don Berna en las elecciones ha sido decisivo”.

Rocío Arias, como puede leerse en varios medios de prensa y expedientes judiciales fue elegida representante a la Cámara por Antioquia, gracias al apoyo de Iván Roberto Duque Gaviria, alias ‘Ernesto Báez’, Ramiro “Cuco” Vanoy Murillo, Salvarote Mancuso Gómez y Diego Fernando Murillo, alias “Don Berna”, quienes coincidieron en confirmar el apoyo que la organización al margen de la ley le brindó a la Parlamentaria. Fue condenada a 45 años de prisión, pero acogió a sentencia anticipada, e inhabilitada 20 años por la Procuraduría, como puede leerse en la prensa. (*) (**)

La misma excongresista Arias reconoció que “representantes de su grupo político ganaron las alcaldías de Tarazá, Cáceres, Heliconia, Caucasia y San Carlos”. Esto reafirma el correo electrónico enviado por “Fredy” a “Don Adolfo”, como también era llamado “Don Berna”. Algunas averiguaciones apuntan a que la excongresista continúa haciendo política con el movimiento Opción Ciudadana, nombre con el que se transformó el Partido de Integración Nacional (PIN).

¿Y quién es “Fredy”, el enlace de “Don Berna” en Heliconia? No existe un dato directo, pero lo que sí hay es otras versiones que, analizando varios escenarios, se puede inferir quién le escribió a don Berna. El PIN fue llamado en su momento “el partido de La Picota”, por cuando lo integraban partidos con excongresistas presos por parapolítica: Movimiento Popular Unido (MPU), Colombia Viva, Colombia Democrática, Convergencia Ciudadana y Apertura Liberal. Después de que los políticos Luis Alberto “El Tuerto” Gil y Juan Carlos Martínez decidieran partir cobijas, Martínez compró la personería jurídica de Colombia Viva y le puso el nombre de ADN, movimiento que fue abortado al inscribirlo ante el Consejo Nacional Electoral (CNE). A fin de cuentas, todos terminaron en fraternidad en el PIN.

En su momento, el senador Juan Manuel Galán denunció en las elecciones de octubre de 2001 “a las bacrim les conviene un alcalde que no denuncie… exploran quién puede ser el candidato que se pueda prestar para sus intereses y hacen acuerdos…financian la campaña… ofrecen los votos”. En cuanto a Heliconia, por ejemplo, mencionó: “Un candidato a la alcaldía de Heliconia (Antioquia) sería integrante de la Oficina de Envigado. Existen intereses del narcotráfico”. 

En las elecciones del 30 de octubre de 2011, en Heliconia, participaron varios candidatos, entre ellos Jhon Fredy Ortíz Tabares (5), avalado por el PIN, quien tiene varias investigaciones disciplinarias en la Procuraduría producto de los malos manejos administrativos. En el 2014 fue sancionado un (1) mes por “irregularidades en un contrato de prestación de servicios con el objeto de diseñar, trazar y elaborar un mural en la pared lateral de la fachada principal del palacio municipal” (6).

La Procuraduría Provincial Aburrá Sur se encuentra en indagación preliminar un proceso disciplinario contra el actual alcalde Ortíz Tabares por el Contrato de Mínima Cuantía (MIC) 55-13 (6), el cual tenía como objeto los “servicios de instalación y desmontaje del alumbrado navideño”. ¿Qué es lo particular de este contrato? La fecha de celebración, pues, aunque aparece firmado el 19 de noviembre, existen versiones y pruebas de que se comenzó a ejecutar desde octubre de 2013.

El contratista, quien fue indagado por la Procuraduría y la Contraloría General de Antioquia en cuanto a las irregularidades denunciadas por un tercero, desmintió y salvó su responsabilidad y la de la administración. Pese a ello pudimos escuchar otra versión, en una grabación, en donde el testigo dice que “el contrato lo firmé el 19 de noviembre y empezamos muchos antes… en octubre”. Lo que contradice esta versión y demuestra que sí se firmó antes aparece en el portal Gestión Transparente, de la Contraloría de Antioquia, en la fecha de reporte del proceso contractual, la cual es 17/12/2012 a las 6:32 a.m. (7).

Las irregularidades investigadas por la Procuraduría se basan en que el contrato se inició sin firmar el contrato y a los trabajadores del montaje no los afiliaron a seguridad social ni a riesgos profesionales. Además hubo un fraude.

“Yo trabajaba como electricista de alumbrado público y me utilizaron… para que hiciera el alumbrado navideño. Yo pedí dos millones… como una comisión. Ellos lo hicieron por 16 millones de pesos y pico. Ellos hicieron el alumbrado que cada año hacen, por 16 millones, que ahí va incluido todo, materiales y mano de obra. Ellos se quedaron los con 14 millones, y yo pedí nada más 2 millones de bonificación. De esos 14 comprarían unos cuantos materiales y lo otro se quedaron ellos con eso. Eso lo vine a descubrir… porque a mí no me habían dado ni el contrato. A mí me hicieron firmar papeles, pero no me dieron copia del contrato. Ellos se embolsillaron parte de eso….”, según puede escucharse en la grabación que conocí y que se encuentra en poder de los entes de control (ver video del audio).

La denuncia por corrupción es muy delicada y puede tener implicaciones legales, disciplinarias y penales, toda vez que el contratista se desempeñaba para la época como electricista de alumbrado público (8), adscrito a la secretaría de Planeación, municipio de Heliconia.

En mi investigación intenté contactar al alcalde Ortíz Tabares, pero fue imposible. A través del correo de la Alcaldía le envié un cuestionario (9) en donde le formulé varias preguntas sobre los contratos y lo publicado en Cambio. La respuesta, a través de la Oficina de Comunicaciones y Tecnología fue esta: “la vida personal y la intimidad es un derecho constitucional del señor alcalde y sobre las demás inquietudes que tiene la apreciación del señor alcalde es que usted tiene más información que él (sic)”. (ver respuesta)

Pese a estos hechos en el 2014 le fue asignado al contratista Ómar León Valencia Muñoz otro contrato con el mismo objeto del alumbrado navideño, como puede verse: Contrato MIC-62-14 (10), por un valor de $16.000.000 (11), y en donde el contratista presenta su experiencia de otros años (12).

Otro asunto muy particular es el sacerdote Óscar Albeiro Ortiz (13), condenado a 19 años de prisión por ser cabecilla de un grupo paramilitar. Ortiz era el cabecilla de una organización criminal que delinquía en el barrio El Limonar del corregimiento San Antonio de Prado, de Medellín. El grupo armado estaba compuesto por desmovilizados del Bloque Cacique Nutibara, dedicados al sicariato, el desplazamiento forzado, la extorsión y el tráfico de armas y drogas.

Este sacerdote, hoy preso, es tío del alcalde de Heliconia, Jhon Fredy Ortíz Tabares, quien maneja a sus anchas las arcas estatales, cubierto por una estela de corrupción. Él, con su poder político, apadrinado por un senador de la U, gamonal antioqueño, espera poner su reemplazo en las elecciones del 2015.

El exalcalde Asdrúbal Gutiérrez Valdés, mencionado en la revista Cambio por nexos con alias “Don Berna”, y del mismo partido de Rocío Arias, Colombia Viva, es asesor de Control Interno del alcalde Jhon Fredy Ortíz (14). El alcalde Ortíz Tabares, preguntado sobre esto, evadió y se escudó en su derecho a la “vida personal” y a la “intimidad”, pese a ser un servidor público. Por lo tanto, sus actuaciones son públicas.

Heliconia, en donde los entes de control no actúan, o si actúan apenas suspenden por un mes, vive una estela de desgobierno. Antes era manejada por el paramilitarismo, con la jefatura de “Don Berna”. Ahora está sitiada por los políticos que se creen los “verracos de Guaca”.

[Publicada en www.bajolamanga.co y http://blogs.elespectador.com/bajo-la-manga/]