EL CARTEL DE LA SALUD EN YARUMAL
La
crisis de la salud es un tema que no podemos eludir en ningún medio, porque la
crisis de recursos y la quiebra inminente de centros hospitalarios es noticia cada
día. Unos le echan la culpa a la Ley 100 de 1993, quizás teniendo razón, pero
hay un mal mayor que ese, que carcome las entidades y se enquista para
desangrarlas: la corrupción y los carteles de la contratación.
En una investigación que desarrollé durante tres meses, partiendo de una primera prueba que llegó a mis manos, pude determinar que el gerente de la E.S.E. Hospital San Juan de Dios, de Yarumal, suscribió un contrato con una empresa de Panamá, de nombre Luxury Capital Invesment, representada por Tatiana Itzel Saldaña Escobar, por $150.000.000 ($US. 75.000) quien además es socia de otras 2558 sociedades que aparecen registradas en Panamá. Estamos ante un claro caso de paraíso fiscal.
El 15 de octubre de este año el gerente del hospital firmó la compra, mediante leasing respaldado por Davivienda, de un bien inmueble en Envigado (Ant.) por valor de $325.000.000, pagando de contado $145 millones y quedando debiendo $180 millones.
Como contratista de la E.S.E. Hospital aparece Ramón Hernando Zapata Rodríguez, paisano del gerente Orrego Castro, siendo los dos del Carmen de Atrato (Chocó), además de socios en la firma Constructores & Asociados Las Vegas S.A., en donde el primero es gerente y el segundo gerente suplente. Esta firma adquirió dos lotes en Sabaneta en 2012: matrícula 001-31213 por $44.800.000 y 001-522106 por $116.200.000. Recientemente, el 15 de septiembre de 2014, vendieron los lotes por un valor de $324.000.000, según Escritura Pública 1238 de la Notaría Única de Sabaneta. [ver Parte II)
Además de las sociedades tienen un cartel de la contratación a través de una empresa y varios contratistas. La empresa Global Marketing y Construcciones S.A.S. fue creada por Ramón Zapata y Beatriz Elena Atehortúa Morales, quien es la representante legal. Esta empresa ha contratado desde el 2012 a la fecha $780 millones de pesos como persona jurídica con el hospital, según puede calcularse con lo reportado en el portal Gestión Transparente de la Contraloría General de Antioquia.
Como personal natural Ramón Zapata ha contrato desde el 2012 la suma de $134.622.450, siendo él, como lo menciona una fuente entrevistada, quien maneja toda la contratación de la E.S.E. Hospital en cuanto a obras civiles y suministros.
Como el régimen de contratación estatal no permite concentrar la contratación en una sola persona natural o jurídica el ingenio de Ramón Zapata y Carlos Orrego, como gerente de la E.S.E. no tiene límites, por lo que buscaron a amigos que fueran de toda la confianza. Es así como a través de seis (6) personas naturales se contrató la suma de $251.030.430. Esta información fue suministrada por Beatriz Elena Atehortúa Morales al abogado Luis Fernando Jaramillo Bedoya, quien ha interpuesto varias denuncias penales por estafa contra ella y Ramón Zapata. (ver Parte I)
Este entidad hospitalaria afronta una crisis financiera que asciende a los $6.000 millones de pesos, por lo que el ministerio de Hacienda a finales de 2013, dentro de un plan de ajuste fiscal, le aprobó $3.119 millones para que aplique un Plan de Saneamiento Fiscal y Financiero que está próximo a ser desembolsado, con lo que deberán pagar las deudas de hace más de dos años con cooperativas y proveedores.
La crisis no ha sido impedimento para que se contrate a una persona que ejecute un diagnóstico del proceso de facturación, implemente estrategias para ese mismo proceso, y posteriormente evalúe lo que él mismo hizo, todos esto en cuatro (4) que suman $228 millones de pesos y de los que fue beneficiario Jairo Martínez Díaz, quien tiene una relación con la jefe de facturación, Martha Cecilia Muñoz Quintero.
Existen otras pruebas que señalan que algunos contratos fueron cobrados, pero no se ejecutaron. ¿Cómo puede suceder esto en una entidad hospitalaria de nivel II, que es el centro de varios municipios del norte de Antioquia? La indignación de la población civil no es suficiente para acabar con estos carteles de la corrupción.
Los entes de control deben evaluar las pruebas e investigar qué es lo que sucede en la E.S.E. Hospital San Juan de Dios, de Yarumal. La salud es un derecho fundamental del que tenemos la obligación de cuidar cada peso que el gobierno gira para que sea invertido en calidad para los pacientes. La corrupción supera a la crisis de la salud.
OTRO CASO DE CORRUPCIÓN: ¿Qué pasa en la Contraloría General de Antioquia que en los últimos meses se ha exonerado a funcionarios públicos por asuntos de corrupción, detrimento patrimonial y otros delitos contra la moralidad pública? Miren este caso: Félix Neftelio Santos Pestaña, gerente de la E.S.E. Hospital La Misericordia, de Nechí (Ant.), contrató con el ingeniero John Esteban Gómez Taborda “la elaboración de los diseños integrales para la construcción de la nueva infraestructura de la E.S.E…”, de acuerdo al contrato 282-2012 con un costo de $399.999.983. ¡Oh, sorpresa! Los estudios no fueron aceptados por el Departamento Administrativo del Sistema de Prevención, Atención y Recuperación de Desastres – DAPARD-. Y lo mejor es esto: obtuve el borrador del Auto 051, proferido por la Contraloría Auxiliar de Responsabilidad Fiscal y Jurisdicción Coactiva en donde se ordena “Archivar el Proceso de Responsabilidad Fiscal número 117 de 2014 (…) adelantando en contra de FÉLIX NEFTELIO SANTOS PESTAÑA… por las razones expuestas en la parte motiva de este interlocutorio”. El Auto lo firma Santiago Ortega Mateos, hijo de la Concejala de Medellín, María Mercedes Mateos Larraona, amiga personal del gerente.
